Jornada de relax y de C&S (captura y suelta)

Buenas amigos, este día quise que la jornada fuera especial pues iba a ir acompañado de mi familia y estaríamos toda la noche y el amanecer. Nada más llegar al pesquero la cosa pintaba mal pues se suponía que el viento al atardecer caería hasta quedarse muy flojo y la cosa no fue así, soplaba un viento muy fuerte... Decidimos de quedarnos aún sabiendo que el viento tenía pinta de no parar. Había pasado la media noche y empezamos a montar la cañas, la primera la lancé con gusana americana, como siempre de Dani Pesca, pero me llevé una sorpresa cuando al recoger observé que venía el anzuelo limpio. Como imaginaba el ruame estaba por la zona, así que pusimos tiras de choco y muergo con cáscara.

La primera buena pieza de la noche

La noche pasaba y el viento no cesaba, hasta que sobre las 4:00 de la madrugada dio un parón, pudiendo estar tranquilos un rato de él. Entonces sabía que era un buen momento para que algún sargo se diera por la zona. La sorpresa me la di cuando mi hermano me llamó que traía algo y lo tenía en la orilla, un buen sargo de 1,2 kilos que le entró al muergo entero, para que luego digan que de noche ese cebo no vale...

Alevín de cazón (C&S)

Tenía esperanza de que pudiera coger yo alguno similar pues siempre suelen ir en bancos, pero no fue así. No fue hasta pasado un rato cuando revisando una de mis cañas noto un peso pero no ofrecía resistencia. Lo traía sin problemas y en la orilla me percaté que se trataba de un alevín de cazón, que lógicamente volvió al mar tras desanzuelarlo vivo y sano. Espero que cuando gane unos cuantos de kilos me vuelva a visitar. Llegó el amanecer y el viento había empezado a soplar otra vez, entonces era el momento de poner las gusanas americanas y lanzar las cañas a diferentes distancias, pues siempre los peces no andan muy lejos. El tiempo pasaba y la cosa no pintaba bien, cogí algún roncador y baila en los primeros rayos de sol que nuevamente fueron devueltos.

Alevín de raya (C&S)

La playa se animó de pescadores pero el cambio del viento hizo que soplara lateral, empezando a abandonar la playa los pescadores, bañistas y paseantes. Nosotros también lo decidimos, pero antes comimos para llegar almorzados. Una vez echo mientras recogía la primera caña sabía que traía algo, no tiraba pero la resistencia era considerable. Poco a poco la traje hasta que me supuse que se trataría de una manta, pues no veía indicios de pez. Así fue, un alevín de águila de mar que tras quitarle el anzuelo volvió al mar.

Tocaba el turno de la otra caña y nuevamente ocurría lo mismo, peso... Misma operación y un nuevo alevín de águila de mar que tras devolverla al mar puso fin a un día bastante malo de pesca, aunque lo importante es que pasamos un buen día de familia dentro de lo posible.

Saludos, en cuanto pueda subiré un vídeo...